La directora de la Fundación Mi Ciudad Con Vida, Nury Buendía, es una mujer con corazón barranquillero, psicóloga de la Universidad del Norte, especialista en trastornos cognoscitivos y del aprendizaje de la Universidad del Norte, y candidata al “Doctorado en Psicología con Énfasis en Neurociencias” de la Universidad de Maimónides en Argentina.
Posee una amplia trayectoria en el área social. Desde hace más de 20 años está trabajando con poblaciones vulnerables, sus esfuerzos han estado dirigidos en lograr disminuir la deserción escolar trabajando con cada uno de los factores de riesgo que inciden en la tasa de abandono escolar. Los niños de estas poblaciones se desvinculan desde muy temprana edad del sistema educativo, en mucho de los casos estos son usados como menores trabajadores, aumentado así el riesgo de consumo de sustancias psicoactivas, vinculación a pandillas, explotación sexual y embarazos a temprana edad. Además, dentro de estos factores está el fracaso escolar por discapacidad cognitiva.
Uno de sus mayores logros en su carrera es en el sector de la educación, logrando la coordinación de proyectos que han permitido que durante los últimos 20 años en el barrio Lipaya, se haya logrado disminuir de forma significativa la deserción escolar. Además, el lograr la apertura, desde hace 3 años, de los proyectos del Comedor Nutricional y Apoyo Escolar en el barrio Nuevo Horizonte en el municipio de Soledad, Atlántico.
Estos logros han sido posible gracias a que ha creado una articulación entre los donantes internacionales, el equipo de trabajo de la Fundación Mi ciudad con vida, los entes gubernamentales, los padres de familia y la comunidad.
Su propuesta ha estado enmarcada en un liderazgo participativo, donde cada persona que forma parte de esta red, es un ente creador de cambios sociales. En sus propias palabras: “Estar al frente de la Fundación Mi ciudad Con Vida ha supuesto todo un reto a nivel personal y profesional, donde siempre mi motivación han sido los niños de estas comunidades”.